El clúster OnTech Innovation ha reunido a una veintena de representantes del sector tecnológico de Andalucía, entre los que se ha encontrado nuestro decano, David Cruz, para analizar el impacto del COVID-19 en las TICs, las expectativas de futuro y su papel como motor económico de Andalucía.
Esta conferencia online celebrada desde el Auditorio Global Omnium de Sevilla ha puesto de manifiesto el papel estratégico que han jugado las TICs durante la pandemia del Coronavirus. El confinamiento y las restricciones de movilidad han obligado a las empresas a adaptarse al teletrabajo, a acelerar su proceso de transformación digital y a habilitar nuevos canales de comunicación y ventas basados en la tecnología. Sin embargo, la nueva realidad que se está configurando a raíz de la pandemia seguirá necesitando a las empresas TIC, que se han convertido en los cimientos de la reactivación económica.
La jornada ha sido inaugurada por el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, y el consejero de Economía, Innovación y Empresa de la Junta de Andalucía, Rogelio Velasco. El primero de ellos, ha asegurado que el sector TIC es “un pilar fundamental en el cauce dinamizador del proceso de transformación de la empresa”, que se ha visto acelerado por la crisis del coronavirus. González de Lara ha manifestado que, más que un cambio de modelo productivo, Andalucía debe afrontar un cambio de modelo de negocio, que debe ser más productivo, diversificarse, y ganar tamaño y densidad empresarial. En ese cambio, el papel de la tecnología y las empresas TIC “tiene un protagonismo esencial”.
El presidente de los empresarios andaluces ha lanzado también un mensaje de ánimo y esperanza ante los retos y los cambios que están por llegar. “En esta crisis se ha manifestado que la empresa es la pieza clave del modelo de estado de bienestar. Ahora los empresarios somos los sanitarios de la gestión de la crisis económica y social que nos ha traído el virus, tenemos que conseguir que no desaparezca ni una empresa, ni un puesto de trabajo”.
Por su parte, el consejero de Economía, Innovación y Conocimiento de la Junta de Andalucía, Rogelio Velasco, ha señalado que el sector TIC, pese a que también se ha visto afectado por la crisis del coronavirus, “puede liderar la recuperación económica” de Andalucía. “Si el papel de la tecnología ha sido clave estos tres meses, es de esperar que también lo sea de ahora en adelante, avanzando en la nueva normalidad y ayudando a la recuperación económica de los sectores que se han visto más afectados”, ha apuntado, señalando que “se abre un camino de nuevas oportunidades y retos para el sector TIC andaluz”.
En este camino, la Junta de Andalucía y la Consejería de Economía quieren acompañar a la empresa. Velasco ha puesto de manifiesto el esfuerzo de la Administración autonómica en el desarrollo de políticas de innovación y digitalización, así como las distintas líneas de actuación del Gobierno andaluz para que el sector TIC afronte sus principales retos: “la atracción y retención del talento, la especialización, y la consolidación en los mercados globales”.
Situación y expectativas de futuro
Tras la inauguración oficial, comenzó el turno de ponencias que fue inaugurado precisamente por el decano del Colegio David Cruz-Guzmán, que comenzó poniendo en valor el papel que están teniendo las telecomunicaciones en esta crisis del COVID-19. «Salvando brechas digitales que es necesario atajar, es llamativo como en cuestión de días se ha extendido el Tele-trabajo. O como la educación ha pasado de presencial a Tele-educación. Las videoconferencias, la videotelefonía y las comunicaciones unificadas, llevaban con nosotros desde hace años y pese a las ventajas que ofrecían, no había forma de implantarlos. Ahora, en pocos días, se han universalizado y prácticamente ya no conocemos otra forma de reunirnos» .
Según el decano, las infraestructuras de Telecomunicaciones han sifo importantes para sostener todo este proceso, que se ve además incrementado por la digitalización obligada de otros sectores como la Justicia con los Juicios Telemáticos, el sector sanitario y sociosantinario con implantación de telemedicina y teleasistencia, la monitorización y gestión remota de pacientes, las videoconsultas o la teleconsulta profesional, etc. «Y para el control del virus es crítica la información anonimizada de movilidad de la población que extraemos de las redes móviles y, previo consentimiento, la que se obtiene de los propios terminales por la instalación de aplicaciones que permiten tracear los contagios y tomar medidas de contención».
Por todo ello, según expresó Cruz, «gracias al esfuerzo inversor de las empresas y de la Administración, tenemos unas infraestructuras de telecomunicaciones de vanguardia, con un despliegue de fibra óptica líder en Europa y una cobertura 4G del 98% de la población». Y ha recordado que seguirá siendo así puesto que «todo este cambio de hábitos ha llevado a un cambio de Cultura en la población y esta nueva Cultura de lo Digital ha llegado para quedarse»
El decano ha advertido que en las empresas y Administraciones, a la primera ola de digitalización en los Modelos de Relación, con empleados y clientes, seguirá una segunda ola más profunda de Transformación en los procesos de negocio. «La Transformación Digital lleva años en los planes de las empresas, pero ahora, salvo la económica, las barreras que frenaban un avance más decidido se han derribado, y la necesidad, se ha convertido en urgencia. Es necesario que el paquete de medidas económicas aprobadas por el Gobierno llegue a las empresas, para ayudar a acometer la inversiones necesarias».
No desaprovechó la ocasión para recordar que este año se cumple el centenario de la titulación de Ingeniero de Telecomunicación, que tiene como lema ‘la emoción de conectar’, que «resume con una compleja sencillez nuestra razón de ser: conectar a las personas y sus emociones. Los ingenieros de telecomunicación hemos convertido esta ‘emoción de conectar’ en nuestra profesión y vemos como Andalucía puede presumir de tener un tejido empresarial tecnológico de una alta cualificación. Y no solo con empresas consolidadas, sino con un destacado papel en el emprendimiento TIC. Esto nos hace pensar que a pesar de la dureza de la crisis que atravesamos, el camino emprendido por nuestro tejido productivo es el más adecuado para salir cuanto antes del pozo en el que nos ha hundido la pandemia».
Por último, marcó un reto al sector TIC. «Somos la tercera comunidad del país en empresas tecnológicas, pero seguimos siendo la cuarta en facturación. Ahí tenemos sin duda un reto de competitividad acuciante». «Las empresas andaluzas tienen que aprovechar esta situación que nos ha sobrevenido para abrazar y conseguir cumplir los ODS con nivel alto en los índices, lo que las convertirá en líderes en el panorama nacional e internacional, y les dará acceso a un nuevo espacio de negocio. Salud, Turismo o Agricultura son ejes claves donde el sector TIC andaluz debe tener un papel trascendental de futuro», finalizó.
Al decano del Colegio le siguió en este primer bloque las ponencias del secretario general de OnTech Innovation, Vito Episcopo; y los representantes de empresas tecnológicas líderes como Axesor, Grupo Trevenque, Arelance, AERTEC, Soltel IT Solutions y Emergya. Los ponentes han analizado cómo han adaptado sus empresas y organizaciones a la crisis y qué papel han jugado para el conjunto empresarial andaluz, coincidiendo en que tras la primera ola de digitalización llegará un proceso de transformación más profundo que convertirá a las TIC en empresas tractoras de la innovación y la competitividad en todos los sectores productivos.
En una linea similar a la de David Cruz, se han manifestado también los participantes de la primera mesa de debate, que han abordado las medidas que deben adoptar las empresas en este nuevo escenario y la importancia de la colaboración público-privada. Eduardo Haro (Nazaries IT), José Ignacio Martínez (Dantia), Sam Brocal (Media Interactiva), Enrique Parrilla (Lantia) y Daniel Cintado (Ayanet TIC) han destacado que ahora es el momento de construir equipo y redoblar la apuesta por la formación de los trabajadores; así como de invertir y reforzar el esfuerzo comercial de la empresa, reinventándose para atender las nuevas necesidades de los clientes y abriendo también mercados internacionales.